Puntualidad

Los actos deben iniciarse a la hora fijada. Cualquier demora debe obedecer a una razón muy justificada que debe hacerse llegar a los invitados presentes. Los retrasos pueden originar la pérdida de puesto, al menos en la Presidencia. Ningún acto debe iniciarse con plazas vacantes en la Presidencia, salvo excepciones muy justificadas. Lo normal es que las ausencias sean suplidas.